Carta a Tía Carmelita

Junio 30, 2010

Querida Tía Carmelita:


Te mando hoy día de tu santo la décima que me habías pedido.  Me honras inmerecidamente al acordarte de esas pobres rimas y me atrevo a agradecértelo con otros versos que más abajo adjunto, inspirados por las palabras de mi madre acerca del abuelo José María, por la innegable categoría de la familia Luengas a la que con tanto orgullo pertenezco y de la que tú digna e insuperablemente empuñas en alto su distinguido estandarte, y sobretodo, querida tía, por tu admirable y bellísimo ejemplo de carisma, bondad y cariño de toda la vida para con todos nosotros. Quisiera aclarar que para reconocer en verso al enorme número de familiares Luengas que también son de categoría--desde los queridos tíos mayores cuyas viejas fotos invariablemente me llenan el corazón de añoranzas hasta mis querídisimas tías Sánchez Luengas y todos los demás primos y sobrinos--necesitaría varias docenas de cuartillas. Todos ellos tienen también el privilegio de ser distinguidísimos miembros de la familia Luengas.


Acompaña a estas líneas mi admiración y agradecimiento a tu empeño de plasmar con tu hábil, pródiga y elegante pluma tan entrañable relato.  Espero que te vaya muy bien en Europa con tus hijas. Saludos y muchísimas gracias por este inmerecido honor.


Te pongo aquí lo que había escrito mi mamá, mi décima y luego los otros versos.


¡Gracias, tía!


A mi Tía Carmelita en su
Cumpleaños


Así es mi tía Carmelita:

siempre guapa, inteligente

Luengas, indudablemente,

y de elegancia exquisita.

Y con ternura infinita

es ella ejemplar esposa,

una magnífica abuela,

asombrosa bisabuela,

madre siempre bondadosa,

y conmigo, cariñosa.

Décima a mi tío, Lic. Agustín Limón Krauss

Celebrando su nombramiento de decano
de los notarios del estado de Veracruz


Eres gran veracruzano,

eres notario notable,

abogado incomparable

y del Colegio, DECANO.

Eres todo un ciudadano

y pienso, con emoción,

amigo de corazón,

que eres marido ejemplar

y un padre, también, sin par.

Saludos, ¡Tino Limón!


Carta de mi Madre acerca de don José María Luengas, su Abuelo

¡Sí, mis hijos! Poseemos dentro de la familia Luengas, la figura

inolvidable, señorial del abuelo don José María.

Me preguntará alguno de ustedes: Bueno. ¿Y qué hacía don José María?

¿Tendría algún título?

¿Poseería casa o tierras por herencia?

Pues NO. ¡Absolutamente NO!

Era únicamente un hombre honrado, trabajador, que unido a su esposa,

nuestra querida abuelita Charito, procrearon doce hijos, entre ellos el Tío

Rafael ¡Inolvidable¡

Creo que Carmelita es dignísima heredera de ellos, y a ella, y a su

inteligencia y amor le cedo la palabra.

TERESA Marzo 2011


Luengas de Categoría

Hombre bueno y gran señor

Era todo un caballero

De entendimiento certero

De gran humano calor

Y un padre de lo mejor.

Era don José María

¡Luengas de categoría!


Jalapeña y erudita

Guapa, inteligente y lista

De los Luengas gran cronista

Y de elegancia exquisita

Ella es mi tía Carmelita.

Nieta de José María

¡Luengas de categoría!


Mi heredad gozosa grita:

Llena mis venas, henchida,

la sangre Luengas, querida,

la de Tere y Carmelita,

la de Rafael y Tita,

la de don José María

¡Luengas de categoría!